Hablábamos recientemente de que la DGT prevé reducir la velocidad de 50 a 30 km/h en determinadas zonas urbanas en la próxima modificación del Reglamento General de Circulación. El Instituto Universitario de Investigación de Tráfico y Seguridad Vial (INTRAS) de la Universidad de Valencia ha llevado a cabo un estudio, con el título “Zonas 30“, analizando las ventajas de esta reducción de velocidad.
La propuesta de modificación del Reglamento General de Circulación, ante la posible introducción de las “zonas 30”, expone:
“La pacificación del tráfico urbano, la potenciación del uso de la bicicleta y la reducción de la siniestralidad en los cascos urbanos son tres objetivos que tendrán como aliado muy importante la introducción general del límite de velocidad de 30 km/h en muchas de las calles de nuestras ciudades”
Aunque este posible cambio ha alarmado a muchos, lo cierto es que las cifras de siniestralidad muestran que han de tomarse medidas al respecto: durante el año 2013, se registraron 224 peatones fallecidos en vías urbanas, 1.775 heridos graves y 9.400 leves. Fallecieron, además, 24 ciclistas en este tipo de vías, 347 resultaron heridos graves y 3.408 heridos leves. En los datos registrados a lo largo del año 2013, el factor velocidad estuvo presente en el 22% de los accidentes mortales.
ACCIDENTALIDAD Y VELOCIDAD
En la investigación llevada a cabo por INTRAS, nos explican la relación entre la velocidad y la accidentalidad a través del modelo Power Model de Nilsson. Según éste, reducir la velocidad media solamente un 5% ya reduciría los accidentes con heridos en un 10% y los accidentes mortales en un 20%.
Otros estudio también han demostrado que sólo con reducir la velocidad en un 1%, se reducirían los accidentes de tráfico. Además, datos de la Organización Mundial de la Salud de 2011, reflejan que el riesgo de muerte en un atropello a 50km/h es ocho veces más alto que si se produjera a 30km/h.
Datos del European Transport Safety Council (ETSC)
- En un atropello a 64 km/h, el 85% de los peatones muere.
- En un atropello a 48 km/h, el 45% de los peatones fallece.
- En un atropello de 32 km/h, el 5% de los peatones fallece.
ZONAS DE VELOCIDAD 30 EN EUROPA
Países como Holanda han ido introduciendo las zonas de velocidad 30 desde el año 1983. Suiza es otro ejemplo, donde ya se ha reducido el límite a 30 km/h en 31 zonas residenciales. En Dinamarca, desde 1977, existen zonas 30 y zonas 15 en varias zonas residenciales.
Las experiencias de estos países demuestran que reducir la velocidad supone una disminución tanto del número de accidentes como de la gravedad de los mismos. En Dinamarca, por ejemplo, los accidentes se redujeron en un 77% y las víctimas en un 88% en tres años.
OTRAS VENTAJAS DE REDUCIR LA VELOCIDAD
Además del descenso de accidentes y víctimas, establecer zonas 30 mejoraría nuestra calidad de vida, ya que se reducirían los niveles de ruido y las emisiones contaminantes. También mejoraría la habitabilidad y la sostenibilidad de las ciudades.