Durante los últimos 6 años, desde que entró en vigor el permiso por puntos, más de 140000 personas han perdido su permiso de conducir por cometer infracciones al volante y para volver a recuperalo estos conductores tienen que realizar un curso de sensibilización y seguridad vial y volver a examinarse de nuevo.
Muchos conductores no son conscientes que al cometer temeridades al volante no sólo están poniendo en riesgo su vida sino también la del resto de usuarios de la vía, y a pesar de que realicen los cursos d concienciación vial para volver a obtener el permiso de conducir, la rehabilitación no es completa y vuelven a repetir las conductas imprudentes al volante.
Concretamente el 60% de los conductores que ha pasado por uno de estos cursos ha acabado reinciendo en las malas prácticas al volante en un plazo de menos de dos años.
Por infracciones, de los puntos restados por dar positivo en un control de alcoholemia, el 20% de esas personas volvió a coger el volante tras haber bebido, mientras que los que circulan con exceso de velocidad también reinciden en un 18% de los casos.
Esas clases de sensibilización y reeducación no son lo suficientemente eficaces porque no logran transmitir la sensación real de peligro, por lo que los expertos empiezan a proponer otras terapias psicológicas.