Realizar una conducción eficiente con nuestro vehículo ha ido cobrando cada vez más importancia en los últimos años. Nos permite ahorrar combustible y contaminar menos el medio ambiente. ¿Quieres saber cuáles son las diez claves para realizar una conducción eficiente? El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) ha establecido estas diez reglas:
- No pisar el acelerador y no esperar a iniciar la marcha tras el arranque, salvo en motores turboalimentados, nos puede ayudar a ahorrar un poco de combustible.
- La primera marcha solamente debe ser utilizada para iniciar la marcha. Tras dos segundos o seis metros, aproximadamente, se debe cambiar a segunda.
- En el caso de los vehículos de gasolina, es óptimo cambiar de marcha alrededor de las 2.000 revoluciones por minuto (rpm), mientras que en los diésel lo es a las 1.500 rpm. En cualquier caso, es importante conocer el coche y saber en qué punto es mejor cambiar.
- El vehículo consume menos carburante con marchas largas. Se deben utilizar siempre que se puedan a pocas revoluciones con el acelerador a medio pisar.
- Para decelerar, el IDAE recomienda dejar rodar el coche con la marcha engranada.
- Una velocidad uniforme, evitando acelerones y deceletaciones bruscas, permite un ahorro de combustible.
- Podremos también disminuir los libros de carburante gastados si nos anticipamos a posibles acciones del resto de conductores. Si mantenemos una correcta distancia de seguridad, evitaremos pegar frenazos.
- Si las condiciones de la conducción lo permites, lo mejor es parar el coche sin reducir previamente la marcha.
- Es recomendable parar el motor en paradas de más de un minuto.
- Para ahorrar combustible podemos llevar a cabo todas estas acciones, siempre que las condiciones de la conducción y la seguridad del tráfico lo permitan.
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