Hay algunos elementos del vehículo a los que no les damos la importancia que se merecen, y uno de ellos es el parabrisas de los vehículos.
Es habitual ver parabrisas con golpes y rayaduras, y la mayoría de la gente piensa que no pasa nada, pero lo cierto es que el parabrisas tiene un papel muy importante en la seguridad pasiva del vehículo y reduce los daños en caso de colisión.
Un estudio realizado por Manuel Ballbé, Delegado de la UAB en la Escuela de Prevención y Seguridad Integral, y Yaiza Cabedo, del Equipo de Investigación de la UAB, para Carglass, empresa de cambio y reparación de lunas, revela que los cristales del vehículo constituyen en un 30 % el sustento físico del habitáculo. En caso de vuelco, sin no tenemos un parabrisas en buen estado, el coche se puede aplastar con mayor facilidad.
Algo que puede parecer tan inofensivo como un pequeño desperfecto en el cristal por el impacto de una piedra puede hacer que se pierda la resistencia del parabrisas hasta en un 70%, si nos ocupamos pronto de ese pequeño impacto las consecuencias pueden ser peores, ya que las tensiones que soporta el vehículo al circular y debido también a la acción del agua, el viento, el frío y el calor, ese pequeño impacto será el punto de partida de una grieta que puede acabar con el cristal.
Así que ya lo sabes si tienes un pequeño impacto en la luna de tu parabrisas no te lo tomes a la ligera.