Las distracciones al volante son uno de los motivos más frecuentes de accidentes de tráfico, por eso no parece mala idea preparar en las autoescuelas a los futuros conductores para que sepan actuar frente a las distracciones.
De hecho, según los datos de un estudio llevado a cabo por la Asociación Europea de Autoescuelas (EFA) y el fabricante de neumáticos Goodyear, en España el 64 de los profesores de autoescuela creen que se deberían introducir distracciones en el examen práctico de conducir para ayudar a los alumnos a afrontar estas situaciones de riesgo cuando obtengan el permiso de circulación.
En otros países los profesores se muestran aún más partidarios de esta medida, por ejemplo el 96% de los profesores del Reino Unido, el 74% de los de Turquía o el 73% de los de Francia introducirían las distracciones en el examen práctico, mientras que en el otro extremo se encuentran los profesores de la República Checa, donde solo el 36% de ellos apoyan que los futuros conductores se examinen con distracciones durante la prueba.
Otra de las medidas que también es vista por los profesores de autoescela es que el alumno siga las indicaciones del GPS, una medida apoyada por el 60% de los profesores de formación vial, o que los alumnos conduzcan con un dispositivo de manos libres y atiendan una llamada telefónica, apoyada por el 57%.