Cómo conducir con nieve

Las condiciones climatológicas propias del invierno dificultan la conducción, ya te hemos explicado cómo conducir con hielo, y ahora llega el turno de la nieve.

Cómo conducir con nieve:

• Arranca en 2º o 3ª marcha
• Debes realizar cualquier maniobra con mucha suavidad, especialmente frenar, acelerar o girar el volante.
• Es muy importante hacerte ver, debes circular con la luz de cruce, aunque sea de día, e incluso si es necesario con las luces antiniebla.
• Utiliza cadenas o neumáticos especiales para la nieve. Aquí puedes ver toda la información sobre cómo colocar las cadenas de nieve, con vídeo explicativo incluido.
• Circula sobre las marcas que hayan dejado otros vehículos sobre la nieve. Si no hay rodadas, circula por la nieve virgen, ya que la tener textura terrosa tiene mayor agarre.
• Aumenta la distancia de seguridad.
• Presta atención al deshielo.
• En caso de que al frenar se produzca deslizamiento del vehículo suelta el pedal de freno para recuperar la adherencia, luego frena otra vez, pero frena siempre de forma progresiva.
• Si notas que el coche derrapa nunca frenes, lo que debes hacer es levantar el pie del acelerador y girar el volante hacia el lado que ha girado la parte trasera del coche, después vuelve a enderezar el volante.
• Si la nevada es intensa es posible que no puedas circular y te quedes “atrapado”, por eso es recomendable que lleves el móvil cargado, el depósito lleno, agua, comida, ropa de abrigo…