¡¡NOVEDAD!! SIMULADOR DE CONDUCCIÓN PARA ESCUELAS DE MANEJO. Infórmate sin compromiso enviando un correo electrónico a info@drivesimsimulator.com


En los últimos años y en virtud de la preocupación de Organismos Internacionales como la ONU, con respecto a la seguridad vial y a la reducción de accidentes por este motivo, las políticas con respecto a los niños se han ampliado y mejorado.

Algunos consejos para mantener la seguridad de los menores son:

a) Los niños menores de 12 años no pueden viajar en el asiento delantero del vehículo, ya que pueden sufrir lesiones severas ya sea por el parabrisas en el momento de un siniestro, o por el impacto de las bolsas de aire, que en su momento podrían incluso impedir su respiración adecuada, provocando la muerte.

b) En los asientos traseros, los niños de entre 3 y 12 años deberán contar con sistemas de sujeción homologados, o en algunos casos, los vehículos ya cuentan con un pequeño asiento incorporado. Aquellos niños menores de 3 años, deberán utiliar siempre el sistema de sujeción, con la vista al frente y perfectamente bien sujetados.

En América Latina, viajar con niños es hoy en día bastante común, sin embargo, la mitad de los menores viaja incorrectamente sujeto, la mayoría de los niños mayores a cuatro años no lleva puesto el sistema de retención. Los niños de entre 4 a 6 años solo el 11% lleva el cojín elevador adecuado. Niños de entre 7 a 9 años, solo el 20% viaja sujeto y lo hace sin cinturón de seguridad, no con el sistema adaptado a su edad y estatura.

Un niño que viaje sin ningún tipo de sujeción, multiplica en cinco sus posibilidades de sufrir lesiones mortales. Por ningún motivo se debe usar un solo cinturón de seguridad para dos niños o un niño y un adulto. No lleve a su bebé en brazos y no coloque objetos pesados o de gran tamaño en la bandeja trasera del coche, esto podría dificultar la visión del conductor o en caso de frenado, provocar daño a los pequeños.

Use para los niños únicamente el asiento de seguridad en el asiento trasero, las ventanillas deben estar cerradas a fin que que los pequeños no se asomen o arrojen objetos al pavimento. Utilice un parasol para el niño y evite que el sol le de directamente.


Hay ciertas precauciones que tanto peatones como conductores deben tener en cuenta al momento de emprender un viaje por las calzadas de un sitio para evitar así cualquier tipo de inconveniente o accidentes de baja o alta gravedad.

Zona de incertidumbre

Todos aquellos peatones o vehículos que circulan por las vías públicas están rodeados de un espacio o zona hacia donde tienen la posibilidad de  desplazarse de un modo imprevisto; esto es lo que se denomina “zona de incertidumbre”. Para esclarecer algo más el tema, veamos un ejemplo: En el momento en que un peatón se encuentra cruzando la acera, se encuentra rodeado, por delante y por detrás, de una zona de incertidumbre para el conductor de un vehículo que se acerca ya que el peatón en cuestión puede tener de un momento al otro, una reacción imprevista tanto hacia adelante como hacia atrás a la que debemos estar preparados para prevenir cualquier tipo de accidente.

También los vehículos poseen una “zona de incertidumbre” especialmente a escasa velocidad, ya que el conductor puede frenar abruptamente, de forma lateral o hacia adelante así como también cambiar de dirección sorpresivamente o ser víctima de la apertura inesperada de una puerta.

Zona de riesgo

En la parte anterior de los vehículos existe una zona que se considera altamente peligrosa denominada “zona de riesgo”: el sitio corresponde al espacio necesario para detener un vehículo a velocidad. La zona de riesgo aumenta al acelerar el rodado y disminuye al momento de descender la velocidad.

El acto de superponer la zona de riesgo de nuestro vehículo con la zona de incertidumbre del vehículo precedente o procedente resulta sumamente peligroso. Exactamente lo mismo se puede decir de aquellas maniobras de adelantamiento en las que las zonas de riesgo de ambos vehículos involucrados generan la aproximación peligrosa de las mismas. De ahí surge la alta necesidad de mantener siempre las “distancias de seguridad” cuando circulamos detrás de otros vehículos.

Es importante para nuestra seguridad y la de los demás, respetar y guardar las normas de tránsito para evitar así cualquier tipo de accidente.

 

 



El cinturón de seguridad es la herramienta más eficaz en la prevención de las graves  consecuencias de  posibles accidentes de tránsito.

Por este motivo, la mayor parte de los países latinoamericanos ha establecido en sus estatutos la obligatoriedad legal en el uso del mismo.

Pero, más allá de la obligación legal, es importante entender que la utilización de este dispositivo puede llevar, en muchos casos, a evitar lesiones graves o hasta, incluso, la misma muerte de quien lo lleve puesto.

Importancia de su uso

Para comprender la importancia del cinturón es necesario entender qué es lo que sucede dentro del vehículo al momento de una colisión ya que se dan simultáneamente dos envites: por un lado el choque como tal, y por otro, producido como reacción inmediata, el golpe de los ocupantes contra el parabrisas delantero; llegado incluso el caso en que los viajantes salen despedidos por fuera del automotor. Es este segundo impacto el que en la mayoría de los casos, causa las lesiones más importantes e incluso el deceso de la víctima. Las estadísticas indican que  tienen mayor probabilidades de vida aquellas personas que se mantienen dentro del vehículo que aquellas que no lo hacen.

¿Por qué sucede esto?

Al estar dentro de un vehículo, sus ocupantes se desplazan, sin sentirlo, a la misma velocidad que él. Al momento de un impacto, el rodado se detiene inesperada y violentamente, mientras que sus ocupantes siguen viajando  a la misma velocidad anterior .Por lo tanto, ninguna fuerza actúa sobre ellos para detenerlos. Un golpe de este tipo, a una velocidad de 50 km/hr equivale a caer de boca desde el segundo piso de un edificio.

Investigaciones internacionales altamente calificadas han indicado fehacientemente que el aumento del correcto uso del cinturón es directamente proporcional a la disminución de lesiones graves e incluso fatales provocadas por un accidente de tránsito.

Recuerda siempre que con solo un clic en el cinturón de seguridad, puedes salvar tu vida.

 

 

 


Toda población civil tiene la responsabilidad de contar con los conocimientos básicos para ser capaz de reaccionar de manera inmediata a situaciones que pudieran poner en peligro la vida de las demás personas, logrando elevar las posibilidades de sobrevivencia de cualquier víctima de un siniestro.

Respiración de boca a boca

Si la víctima no respira, deberá mantener sus vías aéreas abiertas. Coloque su mano sobre la frente de la persona y cierre las fosas nasales con sus dedos índice y pulgar, con la otra mano mantenga la cabeza inclinada hacia atrás. Ponga su boca sobre la víctima y séllela, si se trata de un niño pequeño de entre 0 y 1 año de edad, no incline su cabeza demasiado, y cubra su nariz y boca simultáneamente, tratando de crear un sello hermético, administre ventilaciones completas y lentas de entre 1 a 2 segundos, para los infantes y niños, de 1 a 1 1/2 segundos.

Tome un buen respiro por cada ventilación para procurar una mayor cantidad posible de oxígeno. Compruebe si está dando ventilación adecuada observando si el pecho se levanta y cae con cada respiración, podrá escuchar el aire escapándose con cada exhalación.

Si lo anterior no es posible, reposicione la cabeza y reabra las vías aéreas de la víctima. Si la victima tiene pulso pero no respira, influya la respiración cada cuatro o cinco segundos. En niños será cada 3 segundos. Procure revisar constantemente si la víctima está respirando, use su oído. Si la víctima ha recobrado la respiración espontáneamente y tiene pulso pero está desmayada, acomódela en una posición de seguridad.

Si la víctima sigue en paro respiratorio, solo pare en caso de que: la víctima respire espontáneamente, que no haya pulso, para lo que tendrá que iniciar la resucitación cardiopulmonar, que reciba ayuda de los técnicos de urgencias médicas, que el rescatador se encuentre agotado físicamente, que la escena se haya vuelto peligrosa para el rescatador.

Reanimación cardiopulmonar:

Además de la ventilación asistida, deberá realizar compresiones torácicas, estas son seriadas y consisten en aplicar compresiones de manera rítmica sobre la mitad del pecho. Ponga a la víctima en posición horizontal sobre una superficie firme y plana, coloque sus dedos sobre el borde de las costillas y deslice los dedos índice y medio hasta donde las costillas se unen con el esternón, en el centro del pecho. ponga la mano sobre el esternón, tras los dedos índice y medio. Entrelace sus dedos a fin de que sus manos queden paralelas, y asegúrese que la presión no se hará ni sobre las costillas ni sobre el estómago, sino sobre el esternón.

Extienda los brazos y realice una presión de entre 4 a 5 centímetros sobre el pecho de la víctima, entre más grande sea esta, más profundas deberán ser las compresiones. Si la víctima se encuentra en paro respiratorio, entonces realice 2 ventilaciones lentas y profundas con una duración mayor a dos segundos, seguidas de 15 compresiones torácicas contínuas. En niños y recién nacidos, realice las compresiones de manera más suave.



Un Plan para concientizar a la sociedad en materia de  seguridad vial

En Honduras, ya se oficializó el Programa “Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2011-2020”.

La finalidad de este programa consiste en generar consciencia y cultura de respeto por la vida humana  haciendo hincapié en la prudencia a la hora de conducir y transitar por las  carreteras del país.

Este plan de seguridad vial será presentado como una política del Estado de Honduras y pretende involucrar distintos sectores de la sociedad  en la prevención de accidentes trágicos  en las distintas vías de acceso.

La Secretaria de Seguridad
está trabajando para capacitar a miles de alumnos de más de 700 escuelas a nivel nacional, además se han aprobado las leyes sobre pruebas de alcoholemia, uso del casco y del cinturón, revisión de unidades de transporte,  infracciones de tránsito, e incluso la emisión de una nueva licencia de conducir de manera tal de  establecer un mejor control en materia de seguridad vial.

Según las últimas estadísticas, la  mayor parte de los accidentes ocurre  en las carreteras del norte y de oriente, y ;por su parte en Tegucigalpa, la mayor incidencia de accidentes es en el bulevar Fuerzas Armadas.

El proyecto Decenio para la Seguridad Vial busca generar una cultura de concientización y respeto a la vida, buscando aumentar  la prudencia en el manejo de los vehículos.

Índices de accidentes viales en América

La  falta de prudencia en la conducción como el hecho de no usar casco, no utilizar cinturón de seguridad, al igual que factores como el consumo de estimulantes  sumados  al estado deplorable de algunas carreteras y la falta de respeto por el peatón, han ocasionado en América Latina la muerte de  140 mil personas en el último año.

En América  más de cinco millones de hombres y mujeres sufren traumatismos provocados por accidentes viales.

En Honduras se está trabajando multidisciplinarmente con instituciones del Estado, , organismos cooperantes internacionales y  empresas privadas con el fin de disminuir los índices de mortalidad por accidentes viales e incluso se ha firmado un convenio con la Universidad Nacional Autónoma de Honduras con el objeto de instruir sobre este tema a los estudiantes.