En gran parte de América Latina y el Caribe, las lesiones por accidentes de tránsito son consideradas por lo general, como un problema que únicamente concierne a los organismos del transporte y de vialidad, y no a los organismos de salud pública.
Obligaciones de las autoridades
Lo cierto es que las autoridades sanitarias de cada país, deben proteger y promover la salud de sus habitantes, coordinando todas las acciones encaminadas a procurar la Seguridad Vial. Ya sea mediante actividades específicas como campañas o programas, o atendiendo las emergencias que surjan por dichos accidentes, la autoridad debe tomar acción.
Realizar investigaciones periódicas a través de los organismos de salud y de seguridad, le permitirá a los Gobiernos, conocer los índices de mortalidad que generan los accidentes de tránsito, y desde luego, esto ayudará a implementar las políticas públicas más exactas para reducir la mortalidad, morbilidad y discapacidad, generadas por estos siniestros. Con ello podrán reducir los factores de riesgo, promover la seguridad vial, brindar una mejor atención a las víctimas y desde luego, crear normas y requisitos más estrictos tanto para los conductores como para las escuelas de manejo.
Estadísticas
En México, fue realizado un estudio exhaustivo al respecto, arrojando los siguientes datos. Las tasas más altas de peatón lesionado en accidente de transporte se fueron en los estados de Guanajuato, Tabasco, San Luis Potosí, Tamaulipas, Querétaro, Chihuahua y Jalisco.
Por otro lado, el estado de Sinaloa, tiene una tasa de defunción de ocupante de vehículo de transporte pesado lesionado en accidente de transorte, demasiado alta. Los estados de Colima y Yucatán tienen una mayor tasa de motociclista lesionado en accidente de trasnporte, y los estados con tasas más altas de ocupante de automóvil lesionado en accidentes de transporte son Baja California Sur y Zacatecas.
A pesar de estos índices, las autoridades aún desconocen los motivos de estas tasas tan altas, no se sabe si es por que existe un mayor número de conductores que aprenden a manejar sin ningún tipo de enseñanza profesional, o si es mayor el número de conductores que se deciden por un curso express de manejo. Lo cierto es que los índices son elevados, y requieren una especial atención por parte de la población y de la autoridad.