América Latina es una de las regiones con una mayor tasa de accidentes de tránsito y una parte importante de ellas se relacionan con escasas medidas de seguridad en los automóviles.
De acuerdo con cifras del Banco Interamericano de Desarrollo, en este continente fallecen 17 personas en accidentes de tránsito por cada cien mil habitantes. Sin embargo, con las proyecciones que maneja esta institución, en el 2020 la tasa puede llegar a las 24 víctimas por cada 100.000 habitantes.
Test de choques en los autos más vendidos
El BID es uno de los integrantes del Latin NCAP, una iniciativa que reúne a la Federación Internacional del Automóvil, el Banco Interamericano de Desarrollo, la Fundación Gonzalo Rodríguez y el Instituto Internacional de Investigación y Pruebas para el Consumidor para hacer evaluaciones independientes de seguridad de los automóviles que circulan en los países latinoamericanos.
Por ello, el Latin NCAP realizó pruebas de choques en algunos de los modelos de autos más vendidos en Latinoamérica. Los resultados de esta investigación es que estos vehículos están 20 años por detrás de Estados Unidos, Canadá y Europa en lo que a seguridad de los pasajeros se refiere.
Aunque estos modelos cumplen con los requisitos legales para circular, se obtuvieron estos resultados debido a la ausencia de airbags o al débil diseño del armazón, que en el continente son medidas de seguridad opcionales. Por esta razón, el Latin NCAP y el BID recomiendan que los gobiernos latinoamericanos realicen reformas legales para seguir los estándares internacionales en materia de seguridad automovilística.
Para reducir las estadísticas de heridos y fallecidos en accidentes de tránsito, Argentina y Brasil exigieron a los fabricantes de automóviles que, a partir del 2014, todos los nuevos vehículos deben tener doble airbag, frenos ABS y un armazón lo suficientemente fuerte como para proporcionar un espacio de supervivencia a los pasajeros.
Sin olvidar el factor humano
Esteban Diez Roux, especialista del Banco Interamericano de Desarrollo, señala que unos mejores estándares de seguridad en los vehículos reducirán el número de víctimas fatales y heridos en accidentes viales.
Sin embargo, esto no será suficiente para reducir estas cifras. El especialista declaró que el 50% de los fallecidos en accidentes en América Latina pertenecen a lo que se conoce como grupos vulnerables, es decir, los peatones, los ciclistas y los motociclistas. Por esta razón, los Estados también tendrían que tomar medidas para que los choferes conduzcan con más prudencia.