Los frenos son de tambor o de disco:
El freno de tambor consiste en unas zapatas y el tambor, que van unidos a la rueda. Al pisar el pedal del freno, las zapatas se desplazan y rozan con el tambor deteniendo la rueda. Estos frenos se calientan más y, en casos excepcionales pueden bloquearse las ruedas.
El freno de disco consiste en unas pastillas y el propio disco, que va unido a la rueda. Al pisar el freno, las pastillas se desplazan y consiguen el rozamiento con el disco. Estos frenos son más eficaces que los de tambor ya que se calientan menos y la frenada es más suave, progresiva, existe menos riesgo de bloqueo de las ruedas y se refrigeran mejor.
Los Turismos, los vehículos de tres ruedas y cuadriciclos de motor deben estar equipados con los siguientes frenos:
– Freno de servicio: Conocido como freno de pie. Se acciona con el pie derecho, debiendo procurar frenar con suavidad y lo justo para disminuir la velocidad del vehículo hasta llegar a la detención total del mismo. Este freno deberá actuar sobre todas las ruedas. Los frenos de servicio de los vehículos son hidráulicos, es decir, funcionan con líquido. Con lo que debemos comprobar el nivel periódicamente en el depósito y que éste se encuentre en el límite máximo y mínimo.
Si el nivel baja rápidamente es porque existe alguna fuga en las canalizaciones que llevan el líquido a las ruedas. En estos casos repondremos el líquido y llevaremos el vehículo al taller.
– Freno de socorro: Es el mismo freno de servicio, con un doble circuito independiente que funciona cuando falla el primero.
– Freno de estacionamiento: Se acciona con la mano y generalmente actúa en las ruedas traseras. Permite mantener el vehículo inmovilizado en pendientes ascendentes o descendentes en ausencia del conductor.
Adquiera nuestro vídeo curso en DVD o en MP4
Javier Merino
Profesor de Formación Vial
